Mientras escribía mi anterior post, volví —casi sin darme cuenta— a mirar mi propia constelación de 10 estrellas. La que compartí hace unas semanas en la conferencia “Atrévete al mar: no naciste para quedarte en la orilla”.

Y me di cuenta de algo muy simple: esas estrellas-guía que las he ido dibujando en mis grandes decisiones vitales, me sirven ahora. También me guían en este momento. Porque este “doble-post”, esta decisión, este empezar a mostrarme en LinkedIn con intención… también es, de alguna manera,  un nuevo comienzo.

Así que he querido volver a esas 10 estrellas. Una a una. Pero esta vez, mirándolas desde aquí. Desde este borde. Desde esta orilla nueva que estoy explorando:

1. Confía en el proceso.
Aunque no vea tierra firme, el horizonte —y mi propósito— están ahí. Incluso si no tengo claro cada paso, puedo confiar en que el camino se irá abriendo al andar.

2. Viaja hacia dentro antes de zarpar hacia fuera.
Para mí, esto no va “sólo” de  escribir en LinkedIn. Es preguntarme desde dónde lo hago. Para qué. Cuál es mi contribución. Qué quiero compartir y qué quiero cuidar. Porque la brújula no está fuera: está dentro.

3. Nombra lo que duele.
Y aquí lo digo: me cuesta. Me remueve. Me activa la duda… Y al nombrarlo (y nombrar significa también compartirlo, como lo hago ahora), se transforma.

4. Pide ayuda.
Escucho, me dejo guiar y  acompañar por personas que saben de esto… y saben de mí.

5. Apóyate en tu ecosistema
Mi gente. Las que me leen otros posts, me conocen y me “ven”. Las que escuchan y saben de “mis miedos”. Las que me recuerdan lo que sí soy. Las que me sostienen con la palabra, en el  silencio y con su mirada profesional.  Quienes me Contrastan. Me mueven, remueven y anclan. Y  siempre están.

6. Practica algo cada día
A veces es un post, o una frase, o una nota. Sé que dibujar, escribir, caminar… estar en movimiento  me ancla.

7. Evita la excusa como refugio
Porque a veces me digo “esto no es lo mío” o “esto no funciona” para no hacerlo.  Pero conecto conmigo  y tengo claro que no atreverme y no permitirme probar… es otra manera de zozobrar.

8. Siempre asume tu parte.
No es culpa de la red social. No es culpa del algoritmo. Si quiero estar, tengo que elegir cómo estar. Qué decir. Cuándo callar. Qué mostrar. Y eso… también es responsabilidad y es mi libertad.

9.Suelta la perfección, suelta el control.
No tengo que hacerlo perfecto. No tengo que saberlo todo. Solo estar presente. Mostrarme desde mi autenticidad, en lo que hago y en como soy.

10. Atrévete al mar.
Porque sí, puede que algunos no les guste. Que no cumpla ciertas expectativas. Pero no hay nada más honesto ni viaje más real que ofrecer a manos abiertas mi pequeña (gran) contribución a este ecosistema profesional.

Esta infografía nació originalmente como una brújula para  los nuevos comienzos. Aquí  la he vuelto a aplicar para navegar, con atención e intención, en el mar de Linkedin.

Te comparto ambas.

La primera, digitalizada. Una versión aplicada a este post,  digitalizada, de la versión original.
La segunda, a mano alzada, la que ilustra la conferencia “Atrévete al mar: si no naciste para quedarte en al orilla”.

#DibujatuEstrategia #conecta #comunica #acción #Estrategia #ConsultoríaEstratégica #ComunicaciónEstratégica #Infografías

Si quieres recibir mi newsletter, escríbeme a : info@miryamartola.com
Mi nueva web (y muuucho más) está en camino…  ¡Te voy informando!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *